Drow de la Superficie

Drow de la Superficie (requiere permiso DM)

También llamados elfos oscuros, de las distintas subrazas élficas, ninguna es tan notoria como la de los elfos oscuros. Descendientes de la subraza élfica de piel oscura llamada "Ssri-tel-quessir", los drows fueron presuntamente malditos con su presencia actual por las deidades élficas buenas como castigo por seguir a la diosa Lolth en su camino de maldad y corrupción.

La mayoría de los drows de la superficie son malignos y adoran a Vhaeraun, pero algunos parias y renegados tienen una actitud más neutral, e incluso existen grupos de drows buenos que adoran a Eilistraee y a otras deidades que no pertenecen al panteón tradicional drow.

Los drows tienen la misma expectativa de vida y las mismas categorías de edad que otros elfos. Su tamaño va entre 1.42 a 1.68 las mujeres, y entre 1.36 a 1.63 los varones, siendo más bajos y delgados que la mayoría de elfos de Faerûn.

En nuestro servidor solo es posible jugar drows de la superficie.

Características:

♦ Idiomas automáticos: Élfico, Infracomún.
♦ Idiomas adicionales: Lenguaje de signos drow.
♦ Ajustes de los drows a las características: +2 a Inteligencia, +2 a Carisma. Los drows llevan muchas generaciones siendo seleccionados despiadadamente por su agilidad, su inteligencia y la fuerza de su personalidad. Nota: Como se utiliza la base de elfo, además el drow tiene aplicado un +2 a destreza y un -2 a constitución.
♦ Aptitudes especiales: Inmunidad a Dormir, Fortaleza contra encantamientos, Competencias adicionales (espada larga, estoque, arco corto y arco largo), Afinidad con una habilidad (Escuchar), Afinidad con una habilidad (Buscar), Afinidad con una habilidad (Avistar), Sentidos agudos, Visión en la penumbra, Oscuridad 1 uso/día, Habilidad de levitación a nivel 11, Resistencia a conjuros (11 + nivel del personaje), Bonificador de +2 en las salvaciones de voluntad contra conjuros y aptitudes enajenadoras, Ceguera solar (la luz solar ciega a los drows durante 1 asalto, además sufrirán un penalizador de -1 de circunstancia en todas sus tiradas de ataque, salvaciones y pruebas mientras continúen expuestos a ella).
♦ Zona de inicio: Llanos exteriores de Athkatla.
♦ Cómo selecciono esta raza/subraza: Elige de raza elfo y pon Drow en subraza. Si no cumples alguna de estas restricciones, el mismo servidor no te dejará jugar.

Cómo son los drows

Aunque están divididos por interminables agravios y cismas, los drow están unidos por un terrible deseo; profesan un gran odio contra los elfos de la superficie. Por lo que a ellos se refiere, demostraron ser la raza superior en la cuarta Guerra de la corona, y el hecho de que el Panteón élfico (y Corellon en particular) los castigase por su éxito es un veneno que se agita eternamente en sus corazones y sus mentes. Hierven de odio hacia el Panteón élfico y sus consentidos hijos, y no desean nada más que volver a la superficie y llevar a los elfos un sufrimiento miles de veces mayor que el que los drow se han visto obligados a soportar durante los últimos 10.000 años.

Psicología: Los drow son en general sádicos, destructivos y traicioneros. Se ven a sí mismos como los legítimos herederos de Faerûn y todavía recuerdan la (para ellos) injusticia de su exilio a la Infraoscuridad. Odian a las demás razas y desean hacerles la guerra o ven a los demás con desprecio y sólo les toleran para comerciar o como aliados militares temporales. Incluso entre los de su propia raza, los drows son crueles y recelosos. Apenas hay espacio para el amor y la amistad en la sociedad drow. Pueden valorar las alianzas con otros miembros de la familia o conocidos, pero ningún drow confía plenamente en otro. Los drows forjan alianzas cuando son más poderosos que sus "aliados", poseen alguna información secreta valiosa o tienen un enemigo común que sobrepasa su odio mutuo. Incluso entonces, mantienen alerta sus ojos y oídos al menor indicio de traición.

La mayoría de los drow son crueles, arrogantes y hedonistas. Su eterno juego de mejorar a expensas de otros, alentado por la propia Diosa araña, ha transformado a los elfos oscuros en una raza de traidores intrigantes, ansiosos por mejorar su posición derrumbando a los que están por delante de ellos y aplastando bajo sus pies a sus inferiores. Los drow no confían en nada ni en nadie, y la mayoría sin completamente incapaces de auténtica compasión, amabilidad o amor. Muchos elfos oscuros son asesinos dedicados, y se deleitan en causar dolor. Aunque los elfos oscuros ni honran sus promesas ni mantienen sus lealtades personales una vez que se transforman en un inconveniente, su orgullo les lleva a tener cierto sentido del estilo, y una preferencia por la sutileza. Así, pueden ser corteses y educados, incluso con sus rivales más odiados, y les encanta rodearse de objetos bellos, sin reparar nunca en el coste. Cualquier ciudad drow presenta imponentes obras arquitectónicas y elegantes fiestas marcadas por entretenimientos oscuros y deliciosos, aunque sólo un loco bajaría la guardia en una situación así.

La consigna de un drow bien podría ser, "haz a los demás antes de que te lo puedan hacer a ti". Por supuesto, siempre hay excepciones. Un pequeño numero de drows han llegado a valorar su posición en la Infraoscuridad y ahora se consideran como verdaderos nativos de su reino oscuro. No sienten deseos de regresar a la superficie y quieren en cambio gobernar en las profundidades en lugar de luchar por recuperar un reino que no tienen interés en gobernar. Más raros son aún aquellos escasos drows que han expiado su pasado maligno y consideran a sus compañeros como monstruos que deben ser detenidos. Estos drows son tanto habitantes de la superficie que luchan por ser aceptados en nuevas sociedades como fugitivos que habitan en cavernas apartadas en lo más profundo. Con esta nueva expansión a la superficie, más drows que nunca han sido expuestos a la verdad de la superficie, y muchos se han dado cuenta de que la superficie es mucho más hermosa de lo que los agentes de Lolth y sus parientes les obligaron a creer.

Es posible, con la aceptación y el valor adecuado, que el número elfos oscuros neutrales o benignos se dispare en los años venideros. El sacerdocio de Eilistraee se encuentra al frente de ese movimiento, intentando convertir la guerra drow de la superficie en una conversión en masa de los terribles hábitos de los elfos oscuros.

Descripción física: Los drows tienen una piel de un rango de colores entre el gris oscuro hasta la obsidiana brillante, y un cabello de un tono blanco, plateado o rubio claro. Habitualmente tienen los ojos rojo sangre, aunque no son desconocidos los ojos blancos (tan pálidos que a menudo parecen blancos) con brillos de color lila pálido, plata, rosa o azul. Los elfos oscuros son bajos y delgados, comparados con otros elfos faerûnios, aunque son fuertes para su tamaño. La mayoría son individuos increíblemente atractivos, especialmente los nobles. Lolth no aprueba a los adoradores humildes, simples ni sin pretensiones.

Los ojos de los drows son especialmente sensibles a la luz solar, y tras ser expuestos a esta (o a un efecto mágico que la replique) quedan ciegos durante seis segundos. Después de eso, recobrarán la visión aunque no podrán ver del todo bien debido a una sobreestimulación en sus ojos, por lo que evitan la luz solar. Los ojos de los drows de la superficie están aclimatados a la luz solar, aunque suelen sentir un ligero desagrado debido a la luz solar, aunque no al nivel de los drows de la infraoscuridad.

Regiones: Los drows son una de las razas más comunes en la infraoscuridad, habitándolas en ciudades-estado dentro de la misma en gran parte de Faerûn. Aquellos que viven en la superficie suelen asentarse en diferentes regiones, moviéndose de manera nómada, ya sean los grupos de drows de Vhaeraun como de Eilistraee.

El bosque de Cormanthor es hogar de numerosos grupos de elfos oscuros que se han asentado en este bosque tras la retirada de los elfos. En este bosque, grupos de drows tales como la casa Jaelre, el Clan Auzkovyn, y otras facciones alineadas a Lolth, Vhaeraun o Eilistraee se enfrentan y alían a los humanos y elfos de esta zona por el control del bosque. El bosque de Mir, en Calimshan, posee diferentes asentamientos de drows adoradores de Vhaeraun en este bosque y una de las comunidades más grandes de drows en Faerûn después de la de Cormanthor.

Vida y Sociedad

Sociedad: Los drow viven en sociedades militarizadas, con una fuerte base religiosa. Es una sociedad matriarcal gobernada por las sacerdotisas más poderosas. Los drows no forman naciones pero se congregan en poderosas ciudades-estado ubicadas en enormes cavernas en las profundidades de la Infraoscuridad. Las ciudades drow comercian unas con otras, pero frecuentemente mantienen guerras abiertas. Una típica ciudad drow esta gobernada por un gran grupo de poderosas familias drow, la más fuerte de las cuales gobierna ella misma la ciudad. Cada familia a su vez está gobernada por una matrona, habitualmente (aunque no siempre) una poderosa sacerdotisa de Lolth. Las luchas internas son frecuentes, incluso esperadas, entre las familias gobernantes de una ciudad drow. El estatus de poder de las familias gobernantes cambia casi a diario, aunque las cinco o diez familias mejor colocadas suelen ser más estables.

Las ciudades drow tienden a una organización al azar, ya que las familias más fuertes ocupan el mejor territorio para ellas mismas y dejan a los drow plebeyos construir sus barracas y alimentarse de la manera en que deseen. Las distintas haciendas familiares a menudo se agrupan juntas en la parte más defendida de la caverna, pero esto no siempre es así. Habitualmente, un gran templo público dedicado a Lolth esta situado en la misma zona, a menudo como parte de la hacienda de la familia gobernante. La ciudad misma habitualmente es un enmarañado y caótico desorden de centenares de estilos arquitectónicos. Objetos mágicos que emiten fuego feérico adornan los edificios más prósperos, así como la mayoría de las haciendas familiares. Para la mayor parte, la pobreza, la opresión y la desesperación son la regla en el corazón de una ciudad drow.

Más allá de la ciudad se encuentran enormes granjas donde los esclavos crían al rothé de las profundidades, los hongos comestibles y otros productos necesarios para la supervivencia de la ciudad. Las guarniciones del ejército de la ciudad (segregadas por sexos) están ubicadas cerca, junto con academias que atienden a los magos, bardos, pícaros, asesinos, y expertos en varios campos- A menudo una ciudad forja una alianza con un poderoso habitante de la Infraoscuridad, cómo un contemplador o un dragón de las profundidades, animando a la criatura a que establezca su guarida en las cercanías.

Los drow de la superficie todavía tienen que formar por si mismos algo parecido a una sociedad. Principalmente, los drow de la superficie viven como parias y ermitaños, interactuando con las sociedades establecidas sólo cuando es necesario.

Clases: Las vicisitudes del destino de su casa hacen que la de aventurero sea una profesión atractiva para muchos drow. Algunos aventureros elfos oscuros reniegan de las crueles costumbres de su raza y buscan hacer el bien en el mundo, pero otros siguen siendo malignos, utilizando las aventuras como un medio de acumular el poder y la magia necesarios para vengarse de los rivales que les hicieron caer en desgracia.

Los elfos oscuros son conocidos por su habilidad como clérigos, guerreros, pícaros y magos. Mientras que la mayoría de los drows están dotados naturalmente para sobresalir casi en cualquier profesión que llame su atención, su sociedad tiene una larga y apreciada habilidad con las armas, el poder divino (principalmente en manos de las sacerdotisas de Lolth), y el poder arcano (principalmente en manos de los magos varones). Asimismo, todos los drow sienten una profunda admiración por el sigilo, la astucia y el cuchillo inesperado en la oscuridad. Los elfos oscuros están bien dotados para ser buenos bardos, pero pocos siguen este camino, la exuberancia del bardo no encaja bien en la sociedad drow, aunque todos los,drow pueden admirar un trabajo de calidad. Los exploradores drow son valiosos también, patrullando los túneles de la Infraóscuridad y descubriendo las amenazas a las grandes ciudades de los elfos oscuros. Los drows no se hacen multiclase a menudo, su sociedad tiende a recompensar la especialización en los roles y habilidades esperados.

Clase predilecta: siglos de tradición y presión social han desembocado en un cisma entre hombres y mujeres en consideración a su clase predilecta. Las mujeres drow son aceptadas por la sociedad como clérigas debido a que la Reina araña prefiere a los clérigos de su propio sexo. Como resultado, la clase predilecta de una mujer drow es clérigo. No hay un favoritismo similar para los varones drow, ellos tienen la clase predilecta habitual de los elfos: mago. Clases de prestigio: la clase de prestigio más habitual entre los drow es, sin duda alguna, la de asesino. Muchas ciudades drow tienen prestigiosas e infames academias que entrenan a los jóvenes prometedores en las distintas filosofías de la muerte, y esos gremios han producido algunos de los asesinos de más exitosos en la Infraoscuridad. Los guardias negros son también comunes entre los drow, así como otras clases de prestigio divinas.

Idioma y Nombres: Los drows hablan infracomún, y élfico en un dialecto que presenta muchas palabras y construcciones linguísticas adquiridas de los idiomas de sus vecinos de los reinos inferiores. Aquellos con tiempo y dedicación, especialmente los guerreros, aprenden el lenguaje de signos drow, o idiomas empleados habitualmente por los seres que habitan cerca. Los drow también aprenden los idiomas habituales que se hablan en la superficie cerca de las entradas a su zona de la Infraoscuridad.

Los drows han desarrollado un lenguaje de signos único, el lenguaje de signos drow, que les permite una comunicación silenciosa con gestos manuales hasta 36 metros, siempre que ambos comunicantes se puedan ver. Los signos drow no son un lenguaje automático para los elfos oscuros, un personaje drow debe aprenderlo como uno de sus idiomas adicionales o adquiriéndolo del modo normal mediante la habilidad hablar un idioma. El lenguaje de signos drow no tiene forma escrita o alfabeto. Todos los drows saben leer y escribir.

Los nombres drows son distintos a los nombres empleados por los elfos de la superficie. Suelen presentar letras dobles, y normalmente son agradables al oído. Estas son algunas ideas de nombres y apellidos drow:

Nombres de Mujer: Alauniira, Charinida, Drisinil, Faeryl, Ilivarra, Irae, Myrymma, Pellanistra, Xune, Zarra, Akordia, Chalithra, Eclavdra, Jhaelrnya, Nedylene, SiNafay, Vlondril.
Nombres de Varón: Belgos, Bhintel, Elkantar, Houndaer, Kelnozz, Malaggar, Ryltar, Szordrin, Vorn, Alak, Ilmryn, Merinid, Phraun, Rizzen, Tebryn, Zaknafein.
Apellidos: Dhuunyl, Filifar, Lhalabar, Pharn, Tlin’orzza, Xarann, Yvarragh, Abaeir, Coloara, Glannath, Illistyn, Pharn, Seerear, Vrinn, Xiltyn.

Deidades: Los drow adoran a un grupo de deidades conocidas como el Panteón élfico oscuro, o Seldarine oscuro. Estas deidades fueron expulsadas del panteón élfico hace milenios y exiliadas al Laberinto de los demonios. Están dirigidas por Lolth, la reina araña, y ella es la receptora de la mayor parte de la adoración drow. La segunda deidad drow más popular es Vhaeraun, adorado por la mayoría de drows de la superficie. Los otros dioses permanecen en un segundo plano en el gran esquema de las cosas, ya sea porque están demasiados absortos en sus propios intereses como para aumentar sus fieles (Como Ghaunadaur) o demasiado temerosos o acomodados como servidores de Lolth como para hacer un movimiento para obtener más poder (Como Selvetarm y Kiaransalee).

Una excepción notable es Eilistraee, la solitaria deidad de alineamiento bueno en el panteón drow. Cuanto más y más drow vuelven hacia la superficie intentando expandir sus dominios, un mayor número de ellos abandonan sus prácticas malignas y convirtiéndose a la iglesia de Eilistraee, que ha intensificado últimamente sus esfuerzos para salvar a los drow de sus hábitos destructivos.

Relaciones con otras razas: Los drows no interaccionan muy bien con el resto de las razas inteligentes de Faerûn. Como mucho, un drow considera a los demás razas como ridículas y despreciables. Tienen una pobre opinión incluso de sus aliados, como los kuo-toa. Contra la mayoría de las razas, la única manera de reaccionar que conoce un drow es con el odio y la guerra total. Han erigido poderosas ciudades basándose en la noción de que el camino del poder yace en la dominación de las razas menores y en la erradicación de aquellos que suponen una amenaza a sus hogares. Los prisioneros capturados en las batallas e incursiones drow se llevan generalmente a las ciudades para servir el resto de sus vidas como esclavos. Orcos, grandes trasgos, ogros y otros humanoides salvajes son esclavos habituales. La mayoría de las casas drow poseen dos o tres esclavos por cada drow en la casa. La cría y venta de esclavos es un negocio floreciente en las ciudades drow ya que estos desgraciados realizan todas las tareas domésticas y no cualificadas de una ciudad drow.

Respetan a regañadientes a los duergar y a los azotamentes, ya que los enanos grises y los ilicidos también construyen poderosas ciudades y han demostrado tener la fuerza necesaria para detener los repetidos asaltos de los elfos oscuros. Aunque desprecian a los humanos y a los demás pueblos de la superficie por considerarlos criaturas débiles, los drow reservan su mayor odio y aborrecimiento para los elfos de la superficie, especialmente para los elfos solares y lunares. Odian a sus parientes con una pasión ciega, y buscan cualquier oportunidad de golpear a sus enemigos ancestrales. Actúan con rapidez y crueldad para aprovechar el sufrimiento y la muerte de cualquier elfo que encuentran. Incluso los pocos elfos malignos que hay en la superficie con vistos como enemigos. Los drows a veces pactan con otras razas o individuos si esto les ayuda a conseguir sus siniestros objetivos, pero esas treguas suelen ser temporales. Es sólo cuestión de tiempo hasta que los drows se vuelvan contra sus aliados.

Historia:

Según los elfos de la superficie: Al principio, los Elfos Oscuros o Ssri-tel-quessir fueron la raza que más tuvo de todos los colonos elfos que llegaron al nuevo mundo de Faerûn. La nación de Ilythiir se convirtió rápidamente en una de las más poderosas de las jóvenes naciones élficas. Pero los elfos oscuros no tan solo fueron los elfos de más éxito de su tiempo, sino también los más crueles y celosos. A pesar de sus propios logros, envidiaban también los de sus vecinos. Mientras la primera Guerra de la corona proseguía con furia en el norte, los elfos oscuros llevaron su propia guerra a sus vecinos, buscando dominar los reinos élficos del sur de Faerûn. Tras fracasar por tercera vez en sus intentos de sojuzgar a los reinos vecinos, los elfos oscuros de Ilythiir se volvieron hacia una nueva y secreta deidad tutelar al comienzo de la cuarta Guerra de la corona.

Los elfos oscuros volvieron sus lealtades hacia el Panteón élfico desterrado en el Laberinto de los demonios, y a Lolth en particular. La Reina araña y sus compañeros exiliados (con la notable excep-ión de Eilistraee) otorgaron a los elfos oscuros de Ilythiir grandes poderes mágicos, aliados infernales y ayuda a cambio de su alianza, y los Ilythiiri causaron grandes estragos entre los demás reinos élficos. Pero su victoria y su éxito duraron poco, porque Corellon se estremeció y se enfadó profundamente por los traicioneros actos de los elfos oscuros. Por decreto suyo, los elfos Ilythiiri fueron maldecidos, transformados en drows y desterrados del mundo de la superficie a la Infraoscuridad. Fueron conocidos como los dhaerow (la palabra élfica que significa traidor), y con los siglos esta palabra ha sido la que les ha dado el nombre por el que se les conoce: drow.

Guerras de la Corona:

Nota: Las guerras de la corona son un evento élfico extremadamente antiguo y muy poco detallado, por lo que es algo sólo conocido por elfos (incluyendo a los drows) y muy pocos eruditos de otras razas. Los acontecimientos detallados y específicos son desconocidos inclusive entre los propios elfos salvo altos magos, sumos sacerdotes u otros eruditos élficos.

La primera guerra de la Corona, El comienzo: La primera guerra de la corona comenzó como un debate aparentemente menor sobre territorio y gobierno. Los historiadores de Aryvandaar (reino de elfos solares) habían descubierto un vínculo entre la familia de su gobernante, el coronal Ivósaar Vyshaan, y los Olrythii, la casa líder de Miyeritar (reino de elfos oscuros y verdes). Siempre ambiciosos, los miembros de la casa Vyshaan vieron esta conexión como la excusa perfecta para reclamar el gobierno de Miyeritar. Los elfos oscuros y verdes de Miyeritar, un grupo acérrimamente independiente, no tenían el más mínimo interés en ser gobernados por los altaneros elfos solares. Tras varios siglos de negociaciones, riñas y disputas con los Ilythiiri, la paciencia de los Vyshaan se agotó, y tras reunir a su ejército marcharon sobre Miyeritar, con la intención de anexarla por la fuerza. Así comenzó la primera guerra de la corona.

Tras dos siglos de guerra, Miyeritar fue ocupada por los elfos de Aryvandaar, aunque varios clanes de elfos oscuros y verdes continuaron resistiendo. Los Vyshaanti no lograron tener Miyeritar totalmente bajo su control hasta casi cinco siglos de ocupación. Mientras, supuestamente en represalia por la agresión de Aryvandaar contra los Miyeritanos, los elfos oscuros de Ilythiir se alzaron y atacaron a sus enemigos más próximos, los elfos lunares de Orishaar. La causa alegada para el conflicto era futil, considerando que los elfos lunares de Orishaar no tenían ninguna relación con los solares aparte de una alianza comercial y los Ilythiiri tenían poco que ver con sus primos de Miyeritar. Aunque inicialmente fue visto como una excusa para anexar el territorio de los elfos lunares, esta ofensiva aumentó hasta convertirse en la segunda guerra de la corona.

Segunda guerra de la Corona: Supuestamente, la Segunda campaña fue un intento de los Ilythiiri de vengar a sus agraviados primos de Miyeritar, el único otro enclave de importancia de elfos oscuros en Faerûn. EI salvaje ataque de Ilythiir arrasó diversos reinos élficos, y los elfos oscuros continuaron llevando a cabo brutales incursiones contra los elfos de Keltormir durante los siguientes 1.200 años. Fue durante esta campaña cuando el epíteto dhaerow fue empleado por primera vez para describir a los elfos oscuros de Ilythiir. Dependiendo de la entonación, inflexión y contexto, dherow puede ser traducido como "rostro de sombra", "corazón de noche", "traidor", o toda una legión de otros términos aun menos elogiosos.

Una por una, las grandes casas Ilythiiri buscaron en protectores demoníacos el poder para conquistar a sus enemigos. Viendo en ello una oportunidad de conducir al mal a toda una subraza, Lolth envió al balor Wendonai a Ilythiir. Wendonai tuvo éxito en conducir a la oscuridad a la casa Sethomiir, la casa gobernante de Ilythiir, favoreciendo a Geirildin, su coronal, con dones de poderes oscuros. Otros poderosos nobles illythiir buscaron un patrocinio similar, algunos porque envidiaban el poder recién adquirido del coronal, y otros porque estaban determinados a labrarse sus propios reinos a partir de los escombros de los estados elfos vecinos. Guiados por sus señores demoníacos, los Ilythiiri llegaron a disfrutar de la guerra y la tortura y a despreciar los ideales elfos. Su anterior justificación para la guerra (vengar a sus hermanos del norte) comenzó a sonar hueca tras siglos de matanzas y carnicerías. Incluso los pacíficos elfos verdes y lunares de Keltormir estaban cada vez más horrorizados por las acciones de sus antiguos parientes, y comenzaron a armarse de poder para poder lanzar un ataque de represalia hacia ellos.

Tercera guerra de la Corona, el desastre oscuro: En torno al -10.900 CV, el solar caído Malkizid se convirtió en el benefactor de los altos magos de Vyshaantar y les enseñó muchos terribles secretos de alta magia. Mientras que la segunda Guerra de la Corona continuaba con furia en el sur, Aryvandaar (ahora conocida como el Imperio Vyshaanti) intentó anexionarse el reino de elfos solares y lunares de Shantel Othreier, comenzando así la tercera Guerra de la Corona. Los elfos de Shantel Othreier resistieron los ataques de Aryvandaar durante tres siglos, pero con la repentina y misteriosa muerte de Ynloeth, su coronal, finalmente se rindieron y se unieron diplomáticamente al Imperio Vyshantaar, concluyendo así la tercera Guerra de la Corona.

Más o menos un siglo después, una horrible tormenta mágica conocida como el Desastre oscuro transformó Miyeritar en un erial. La historia (escrita por los vencedores de la tercera Guerra de la Corona) dice que los intentos de Miyeritar para detener los ejércitos de Aryvandaar fueron los causantes del Desastre oscuro. En realidad, la corrupta magia que lo produjo fue convocada por los altos magos de Vysheintar y se extendió sin oposición porque una campaña de asesinatos orquestada por los vyshaanti había destruido a muchos de los altos magos de Miyeritar en los meses anteriores. El Desastre oscuro flotó sobre Miyeritar como una mortaja fúnebre durante meses, y cuando sus espesas brumas y sangrientas lluvias se disiparon finalmente, el antaño orgulloso bosque había sido reducido a una. tierra baldía marchita y venenosa.

Aunque muchos de los habitantes originales de Miyeritar habían huido mucho antes de que estallase la tormenta mortal, innurmerables inocentes murieron de forma horrible. Incluso hoy en día, el Gran páramo sigue estando desolado, con su interior salpicado por las ruinas del antiguamente orgulloso reino de Miyeritar. Sólo unos pocos elfos versados en historia (la mayoría de ellos altos magos y sumos sacerdotes) saben que la mayor parte de los magos que quedaban vivos en Miyeritar entregaron sus vidas en un ritual ahora perdido, y diseñado para preservar el legado de Miyeritar, con la esperanza de que su luz algún día volvería a alzarse de las cenizas del reino.

Cuarta guerra de la Corona, el descenso: La destrucción de Miyeritar enfureció a los Ilythiiri, que con razón culparon a Aryvandaar por el Desastre Oscuro. Cuando la tormenta asesina se desató, los Ilythiiri dedicaron toda su alta magia a la guerra, y el resultado fue una devastación de una escala sin igual. En la cuatro décadas siguientes al Desastre oscuro, los Ilythiiri destruyeron totalmente el reino de Shantel Othreier, que era el punto más próximo a ellos del poder Vyshaanti. En palabras de la Canción de la corona partida, los altos magos Ilythiiri "llamaron piedras desde el cielo", e "hicieron que la tierra hirviese y que los árboles gritasen". Los refugiados del condenado reino de Shantel Othreier contaban tales historias de las atrocidades de Ilythiir que junto a ellas las acciones de Aryvandaar en los siglos pasados parecían minucias en comparación. Tras conocer este salvaje asalto, los restantes reinos elfos se reunieron en una gran conclave y tornaron una decisión que perseguiría a los pueblos élficos para siempre: los Ilythiiri, o "dherow", serían expulsados del favor de Corellon y separados de sus hermanos por toda la eternidad. Los altos magos y clérigos de los Seldarine más poderosos se unieron para realizar un ritual que alteró los cuerpos de los Ilythiiri para que reflejasen la corrupción de sus almas.

Pero aunque el conclave tenía la intención de castigar sólo a los Ilythiiri, el ritual alteró a todos los elfos oscuros de Faerûn. Los elfos oscuros corruptos fueron entonces expulsados hacia los territorios subterráneos por las fuerzas combinadas de todas las naciones elfas. Este acontecimiento, conocido como el Descenso, reflejó la caída de Lolth y de sus descendientes de los Seldarine y de este modo ayudó a sellar la lealtad de la nueva subraza elfa con la Reina araña. La palabra dhaerow (que anteriormente significaba traidor) sufrió una corrupción paralela hasta dar "drow", que se convirtió en el nombre de los elfos oscuros corrompidos. El por qué todos los elfos oscuros fueron transformados en drow y no sólo los Ilythiiri sigue siendo uno de los misterios que permanecen desde el Descenso. Algunos de los teólogos elfos más humildes creen que fue una consecuencia no intencionada, del tipo de las que siempre parecen darse cuando el Pueblo gentil rebasa sus límites en la aplicación de alta magia. A sus ojos, la desastrosa separación de Siempreunidos.de Faerûn, el Desastre oscuro y la destrucción de Jhaamdath caen en la misma categoría.

Tras las guerras de la corona: Después de su exilio bajo tierra, los drow vivieron como nómadas, carroñeros y bestias feroces. Finalmente, por medio de la guía de Lolth, volvieron a unirse como raza y comenzaron a aprovechar su situación, colonizando grandes regiones de la Infraoscuridad. Las primeras civilizaciones drow fueron establecidas en Faerûn meridional alrededor del -9.600 CV. En el -9.000 CV los drow se apoderaron de la gran caverna de Bhaerynden, que pertenecía a los enanos dorados, y establecieron el primer gran reino drow, Telantiwar. Desafortunadamente, los drows de Telantiwar se vieron envueltos en rápidamente en terribles guerras civiles, cuyo resultado fue una serie de explosiones mágicas que colapsaron las cavernas de su nación y formaron la Gran Brecha al sur de Faerûn.

Los pocos drow que sobrevivieron al cataclismo se desperdigaron por la Infraoscuridad, habitando lentamente regiones cada vez más alejadas de sus tierras natales en el sur. Con el tiempo, construyeron docenas de terribles y magnificas ciudades en la Infraoscuridad, un gran logro para gente tan predispuesta a la traición, las luchas internas y la guerra civil. Sshamath, la ciudad de los Tejidos oscuros, fue fundada bajo las colinas Lejanas en -4.973 CV. Menzoberra la Descastada, una gran sacerdotisa de Lolth, estableció la ciudad de Menzoberranzan en -3.917 CV. La casa Nasadra, exiliada de Menzoberranzan, fundó Ched Nasad en el -3.843 CV. Muchas otras ciudades yacen bajo otras zonas de Faerûn, ejerciendo algunas veces su maléfica influencia sobre las tierras de la superficie, como la conquista del reino humano de Dambrath, a manos de los drow de Tlindhet, en 804 CV o los largos siglos de gobierno de Maerimydra sobre el valle de las Sombras hace cientos de años.

Recientemente, los drow han comenzado a extender su influencia sobre la superficie como nunca antes había ocurrido, trasladándose a ciudades élficas abandonadas en la retirada. Han comenzado a entrenarse y habituarse para poder actuar en la brillante superficie del mundo. Para su sorpresa y disfrute, se han encontrado con que debido a la Retirada de los elfos, la presencia de los elfos de la superficie es mucho menor y menos organizada de lo que habían anticipado. Pequeños grupos de drow opuestos a este retorno han realizado esfuerzos para alertar al mundo de la superficie de esta nueva amenaza, pero todavía no ha aparecido una resistencia organizada a la invasión drow del mundo de la superficie.